Lo que sucedió con Chile hace no mucho tiempo era impensable. Una doble campeona de América, finalista de Copa Confederaciones y con un futbol exquisito, y una generación maravillosa, quedó fuera del Mundial. Cierto que las eliminatorias de Conmebol son cada día más reñidas, pero también es verdad que la selección chilena era superior (en el papel) a varias otras.
Tras ese rotundo fracaso, Juan Antonio Pizzi fue cesado y la búsqueda por un nuevo timonel inició hasta que por fin llegaron las palabras ansiadas por todos en Chile. «Llegamos a un total acuerdo para que a partir de ahora se haga cargo de la selección. Este acuerdo fue satisfactorio para él y será hasta el Mundial de Catar 2022. Tenía varias ofertas para dirigir en otras partes, pero prefirió la nuestra», apuntó a la prensa el vicepresidente de la ANFP, Andrés Fazio, refiriéndose a Reinaldo Rueda, técnico colombiano que recién dejó al Flamengo de Brasil.
Reinaldo Rueda no es ningún improvisado en el banquillo. Menos si se trata de temas internacionales. El colombiano de 60 años ha dirigido a selecciones como Colombia, Honduras y Ecuador. Con estas dos últimas, mundialistas en 2010 y 2014 aunque con ninguna de las dos pudo superar la primera fase.
A nivel de clubes solo había dirigido (hasta antes del “Fla”) en su país, destacando con el Atlético Nacional de 2015 a 2017 con quienes conquistó 3 Ligas, una Copa y la Copa Libertadores y Recopa Sudamericana. Con la selección de Colombia Sub 21, ganó en el 2000 el Torneo Esperanzas de Toulon.
En su Curriculum eliminatorio, Rueda tiene vasta experiencia. Aunque no pudo clasificar a Colombia para Alemania 2006 (quedó sexto de la clasificación), Rueda tuvo el 54% de efectividad. Su viacrucis fueron los empates, pues igualó 5 veces. Solamente perdió 3 partidos. Logró meterse hasta semifinales en la Copa América de Perú 2004.
Con Honduras previo al mundial de Sudáfrica, se metió directo como tercer lugar con 5 triunfos, 4 derrotas y un empate, pero en la justa de África, poco pudo hacer con el combinado catracho.
Finalmente con Ecuador en las pasadas eliminatorias rumbo a Brasil se metió apenas, alcanzando el cuarto puesto tras ganar 7 partidos y perder 5. Los 4 empates fueron un bono que le ayudo para finalmente quedarse con el último boleto directo.
La tragedia andina rumbo a la competición intercontinental del 2018 pegó duro en las entrañas de la Federación. Habían encontrado al parecer el idóneo para sustituir a Sampaoli. Pizzi lo hizo de buena manera siguiendo el trabajo de su compatriota. Sin embargo, la hecatombe vino en los últimos cuatro partidos donde los chilenos perdieron 3. Además del divorcio evidente entre Arturo Vidal y la afición. Finalmente, Chile perdió el boleto en la última fecha cayendo 3 a 0 ante Brasil en Sao Paulo.