Que si llegan delanteros de calidad al futbol de México…llegan. Que si no se adaptan y resultan unos terribles fiascos; también. Que si en un equipo funcionan y en otro dan el bajó; muy cierto. La realidad es que Robert De Pinho hizo mucho más de lo que se esperaba, al menos en uno de los tantos equipos en los que jugó. Al igual que Sebastián Abreu, este brasileño es un trotamundos del gol.
De Pinho también brilló en el futbol de España con el Betis, pero en menor medida. Rápido, desequilibraste y habilidoso… era el delantero perfecto. Podía jugar de centro delantero, de extremo…de lo que fuera siempre y cuando fuera al ataque. Debutó y estuvo un año en el Coritiba (1999). Era un prospecto atractivo. Sus números no demostraron ser letal pero el beneficio de la duda era amplio sabiendo que era apenas un chico, un novato.
En el año 2000 llegó el peor año de su vida. En el Botafogo estuvo sin jugar y claro esta, sin anotar. El primer gran año le llegó con el Servette en 2001. Ahí, en el futbol de Suiza, anotó 8 goles en 19 partidos. Su primera gran cosecha goleadora. Regresó a Brasil, se volvió a ir, ahora al futbol de Japón, luego a Rusia… y finalmente llegó a México.
El Atlas lo firmó en 2003. Los rojinegros lejos de ser protagonistas, se sacaron la lotería con un hombre que era una incógnita y que lo hecho en equipos anteriores no era ni siquiera digno de reconocimiento. Pero en Guadalajara, las cosas fueron distintas. De Pinho jugó dos torneos cortos. Anotó 33 goles en 44 partidos Una cifra altísima. Casi un gol por partido; 0.75 de efectividad.
Esas cifras llamaron la atención hasta el Viejo Continente. El PSV lo tentó y se lo llevó en 2005. Aunque nada más estuvo una temporada en la Eredivisie. El brasileño no falló del todo. No era titular, pero en los pocos partidos que disputó (15 juegos), anotó 7 goles. De nuevo, cifra demoledora pero se vio poco. Jugó una semifinal de Champions League, misma que cayeron ante Milan. Por lo mismo, un desesperado Betis lo pidió prestado y lo tuvo un año. Los andaluces tenían la consigna de evitar el descenso y ante la baja de Ricardo Oliveira, el nerviosismo creció. Anotó 16 goles en 48 partido (incluyendo UEFA) y Robert no decepcionó.
Sin embargo, Betis no hizo efectiva la opción de compra y De Pinho se fue como agente libre al futbol de Arabia Saudita con el Al-Ittihad Jeddah. Sin embargo, tras el «paseo» (nunca siquiera se enfundó el escudo) el Monterrey lo trajo de regreso a México. Fue en 2008, donde De Pinho jugó un torneo completo con Rayados sin anotar un solo gol. Por supuesto, la directiva lo mandó a Tecos donde se peleó con Miguel Herrera y esto le abrió las puertas para irse luego al América. El fichaje «bomba» del cuadro azulcrema duró 17 partidos y 4 goles en el peor torneo de la historia de los americanistas.
Luego, un fracaso a donde fue. Corea, Malta, Indonesia, Chile, incluso en el Ascenso MX… y nunca ha podido ganar un campeonato. En ninguna Liga, con ningún equipo.
¿Dónde está hoy Robert de Pinho?
A diferencia de lo que muchos piensan, sigue activo. A sus 37 años juega en su país natal en el Santa Cruz Futbol Clube de la Serie C. Algo así como la Tercera División.