Existe una antigua frase del emperador romano Julio César que dice Veni, Vidi, Vinci, que significa “Vine, Vi y Vencí”. Fue tras la guerra de Zela cuando venció al Rey Ponto y es en alusión a la efectividad y rapidez (y claro, facilidad) que se determina tras un logro. Como Julio César, muchos futbolistas creen que podrán repetir la frase con facilidad gracias al cartel que tienen luego de un exitoso paso por Europa.
No hay más techo que levantar la UEFA Champions League. Son suficiente credenciales para hacerse de una credibilidad y ¿por qué no?, ilusionarse con la llegada de ese futbolista. Tras ganar la máxima competición europea a nivel de clubes, algunos futbolistas llegaron al balompié mexicano con una cartel aunque no todos obtuvieron el mismo éxito de Europa. Para ser justos, muchos llegaron en la etapa final de su carrera.
5. Santiago Solari
El argentino salió de River Plate, donde se formó de 1996 a 1999. Su talento fue detectado rápidamente por equipos de Europa y fue el Atlético de Madrid quien ganó la puja y se lo llevó. Pero tras solo un año en la institución colchonera, el Real Madrid se lo llevó donde no solo consiguió éxitos caseros, sino que también fue titular en el equipo que ganó la novena Champions ante el Bayern Leverkusen en Glasgow.
Además en 2002 también ganó Supercopa de Europa y Copa Intercontinental. Llegó a México para jugar con el Atlante en 2009. Poco y nada del argentino que solo estuvo un par de torneos en Cancún. No fue ni la sombra de lo que alguna vez llegó a ser.
4. Roque Santa Cruz
El delantero paraguayo se fue muy joven al Bayern Munich tras ganar 3 campeonatos con el Olimpia. En Alemania, Roque conquistó desde su llegada no solo los corazones de los aficionados, sino también del equipo al ser fundamental para lograr apenas a su llegada la Champions, Liga y Copa. Fue en la temporada 2000/2001 donde vencieron al Valencia por la vía de los penales, aunque no jugó, formó parte del equipo.
Después de unos años y pasar por el futbol de Inglaterra y de España, aterrizó en Cruz Azul en 2015. Solamente pudo jugar 10 partidos donde anotó 4 goles, porque una lesión lo marginó. No se logró recuperar y volvió a España con el Málaga.
3. Rafael Márquez
Emblema nacional y del Atlas. Rafael Márquez es el mejor jugador mexicano de la historia (para muchos lo es aún Hugo Sánchez). La razón principal es que Rafa logró conquistar cualquier cantidad de títulos con el Barcelona, incluida la Champions League frente al Arsenal del 2005 y la del 2009 en Roma conseguida ante el Manchester United.
A su regreso, jugó con el León donde logró ser bicampeón. Ahora atraviesa una situación legal complicada, pero espera poder levantar con Atlas, el equipo que lo formó el título que llevan esperando desde 1951.
2. Miodrag Belodedici
Pocos lo recuerdan, pero este central rumano tuvo un gran recorrido en Europa y una exitosa carrera dentro del futbol. Llegó para jugar con el Atlante en 1996. Lo hizo por dos temporadas con los Potros sin lograr el éxito con el que venía. Fue internacional con su selección, jugó la Copa del Mundo de 1994 y 2 Eurocopas. Se inició futbolísticamente en el Steua de Bucarest donde ganó 4 Ligas, 2 Copas.
En el plano internacional con su club, ganó la Champions y la Supercopa de Europa. En 1988 llegó al Estrella Roja de Yugoslavia donde el éxito siguió con Ligas y Copas locales, pero también ganó la Champions y una Copa Intercontinetal. En resumidas cuentas, al Atlante llegó un central con dos Champions League. Ni más ni menos.
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Ronaldinho
Para muchos es considerada la bomba más grande que llegó al futbol mexicano. No es para menos. El brasileño marcó una época con el FC Barcelona donde conquistó la Champions (junto con Márquez) del 2005. No solamente eso, fue también campeón del mundo en 2002 y Balón de Oro el año que ganaron la Champions.
Llegó al Querétaro en el 2014 y estuvo un año. Estuvieron cerca de un título que perdieron ante el Santos donde el brasileño logró ser pieza clave, pero insuficiente. Marcó 8 goles en 25 partidos.