Su nombre es Hely Garagozzo. Es venezolano de nacimiento y empresario de profesión. Pero su vida, es justamente el futbol. Lo irónico es que Venezuela no solamente no ha asistido jamás a una Copa del Mundo, sino que tampoco es un país meramente “futbolero”. Es este país sudamericano, lo que más se “consume”, es el beisbol.
Venezuela sufre una crisis social y política en la actualidad. Sin embargo, Hely ha hecho de su vida, una pasión encaminada al futbol. Su gusto por el futbol, comenzó desde pequeño y a raíz de ellos, logró juntar dinero para asistir a su primer mundial, en España 1982 donde pudo ser testigo del tercer título intercontinental de la selección de Italia de la mano de Dino Zoff, Rossi y compañía.
Y desde ese mismo torneo, no faltó a uno solo. Hoy, con Rusia 2018 a la vuelta de la esquina, busca asistir a su décima Copa del Mundo consecutiva. Suficiente para entrar al libro de récords más cotizado y prestigiado del mundo: Guinness World Records.
Él piensa que ha recorrido alrededor de 231.000 kilómetros para asistir partidos de la Copa Mundial, un aproximado a darle la vuelta al mundo casi 6 veces. Si bien, Hely asiste para ver su deporte favorito en eventos de dicha magnitud, le ha servido para recorrer el mundo y conocer lugares inimaginables y representativos para diferentes países alrededor del mundo. Para él, es la misma magia del futbol, que permite lograr esto.
A donde quiera que va, lleva envuelta la bandera de su amada Venezuela. Es incluso ya reconocido tanto como “Manolo el del bombo” quien apoya a España a donde quiera que va. Hely la porta con mucho orgullo. Sin embargo, no es la obsesión mundialista lo que lo lleva, sino el amor al futbol. Por lo mismo, ha asistido a otro tipo de mundiales, los de categoría inferior como los Sub 17 y Sub 20 en Emiratos Arabes Unidos y Egipto, respectivamente.
En cuestiones de tiempo, ha invertido 144 horas de su vida en partidos de futbol de Mundiales. Ahí, ha sido testigo de 24 récords Guinness, como los 5 goles de Oleg Salenko en un solo partido, entre otros. “El mundial que más me impactó por su organización, planificación y atención al turismo fue el de Japón y Korea,” mencionó Garagozzo en entrevista para el libro, refiriéndose al torneo del año 2002. De los 51 estadios que él ha visitado, algunos de sus favoritos son el Estadio Azteca en México, el Allianz Arena en Alemania y Maracaná en Brasil.
Este venezolano emprendedor y empedernido por el futbol, asegura que estará en Rusia con su misma bandera venezolana, el siguiente verano. A pesar de la ausencia de la vino tinto para la siguiente justa, Hely estará allá para mirar partidos con selecciones debutantes como Panamá e Islandia. ¿Quién dice que para el siguiente, no podrá ver por fin en un Mundial a su amada Venezuela?