Top 5: Jugadores europeos míticos que pasaron por el fútbol mexicano
Hoy en día hay una tendencia por parte de los clubes mexicanos para traer a grandes figuras del fútbol europeo. Uno de los casos recientes ha sido el de Gignac, que le ha salido dentro de lo posible, rentable, por así decirlo, a Tigres. Sin embargo, no es fácil conseguir convencer a una importante figura de la élite europea para que venga a jugar a nuestra Liga MX.
Esa dificultad no pasaba hace unos cuantos años. Pues los europeos veían a México con buenos ojos para incorporarse a su liga. Fuese para disfrutar de sus últimos años en la máxima categoría del fútbol; o para tener una experiencia diferente; la liga mexicana era un lugar deseado por algunos, entre esos, grandes estrellas como los integrantes de este Top 5.
Pep Guardiola
El actual entrenador del Manchester City de Inglaterra vino a México para quemar su última etapa como jugador profesional y aprender mucho de los aspectos técnicos de nuestra liga. Algo que él mismo expone en uno de sus libros autobiográficos. Llegó a Sinaloa para jugar con Dorados.
Emilio Butragueño
Ídolo en el Real Madrid e ídolo en el Celaya, el ‘Buitre’ se instaló en México con su familia durante los últimos años de su carrera profesional; y se metió pronto en el corazón de los aficionados. En Celaya se le recuerda con gran cariño por su calidad y por integrar un equipazo con Hugo Sánchez y Míchel González.
José Marí Bakero
Una leyenda auténtica del FC Barcelona. Bakero migró a Veracruz para jugar su último año como profesional con los Tiburones Rojos. Aunque estuvo lejos de ser el hombre que destacó con la Real Sociedad y el equipo azulgrana.
Míchel González
Otra leyenda del fútbol español y del Real Madrid. Jugó para el Celaya, equipo al que llegó por convencimiento de su amigo Butragueño y allí colgó las botas.
Bernd Schuster
El alemán de gran paso por el Real Madrid, estuvo una temporada en Pumas. Sin embargo, ninguna de las dos partes estuvo del todo contento con la actuación del jugador. Schuster pasó sin pena ni gloria por CU.