La Copa Libertadores y su indeciso amor por México
A propósito de la insólita final de la Copa Libertadores entre Lanús y Gremio de Porto Alegre, tal parece que la vida después de México no es igual. Dicho por directivos sudamericanos que han afirmado que la ausencia de México en el torneo sudamericano de más prestigio y antigüedad, ha pegado duro tanto en los bolsillos de la Conmebol como en el interés de la afición.
Partiendo de la premisa que en el futbol mexicano, se dice, están muchos de los mejores extranjeros sudamericanos y en el caso de Tigres, futbolistas de talla mundial, el interés por regresar a México al torneo está latente. De hecho, ante esta final, que se dice será no solo de bajo perfil, sino de nulo interés (más que para las aficiones de estos dos equipos), la Copa Libertadores quiere tomar de nuevo la fuerza que tuvo no hace mucho.
México lleva un año sin participar en este torneo. La última vez que lo hizo, fue en 2016 metiendo el susto de su vida a todo América del Sur con los Tigres que por poco se llevan todas las canicas pero cayeron (inexplicablemente) ante River Plate en la final, donde en la fase regular le había dado una lección de futbol, incluso, salvándole el pellejo para que avanzara a la siguiente ronda. En pocas palabras, dejó a la presa con vida y esta se convirtió en verdugo.
El futbol mexicano participó 18 años en esta justa continental. Desde 1998 cuando fueron invitados por primera vez con América y Chivas, y vaya que le han puesto sabor al torneo. Primeramente, porque México no pertenece a esta confederación, sino al área de Concacaf que tiene su propio torneo (pero de menos calidad). Sin embargo, desde aquel año, los equipos aztecas se tenían que eliminar ante clubes venezolanos donde casi siempre, salían avances gracias al bajo nivel de equipos de un país donde el futbol no es prioridad.
No solamente han participado en Copa Libertadores, también lo han hecho en la Copa Sudamericana, Recopa y Merconorte, donde por cierto, Pachuca ya ganó una Sudamericana. Pero ese es otro tema. Desde el primer año, el balompié azteca dejó buen sabor de boca con el América avanzando a los Octavos de Final. Fue la primera vez que se midieron fuerzas oficialmente con clubes de Conmebol y el resultado fue positivo.
Un par de asó más tarde, la primera campanada llegó, con las Aguilas avanzando hasta semifinales pero cayendo ante Boca Juniors que las superó casi de milagro. Atlas, el otro participante mexicano, se quedó en Cuartos eliminado por el Palmeiras brasileño. Estos equipos que eliminaron a los mexicanos, se enfrentaron en la final. Transcurrieron dos años y México, ya daba de qué hablar en el futbol del sur.
Entonces vino el Cruz Azul un año más tarde con el primer gran susto a toda la Conmebol, llegando hasta la final y perdiéndola en penales ante Boca. La Máquina, ya había eliminado en fila a River y Rosario Central. Esto se repitió en 2010 cuando Chivas perdió la final ante Inter de Porto Alegre y de nuevo hace un año cuando Tigres cayó ante River. A lo largo de 18 años, diversos equipos mexicanos dejaron buena pinta ya que estos 3 últimos fueron finalistas, 5 alcanzaron las semifinales, 9 los Cuartos y 16 veces se jugaron los Octavos. Solo fueron eliminados 10 veces en la primera ronda.
Polémicas, muchas. Como una tanda de penales entre River y Santos Laguna con clara preferencia al cuadro argentino repitiendo penales sin cesar. Otra cuando San Luis y Chivas decidieron retirarse ante la negativa de Sao Paulo y Nacional de jugar ante ellos gracias a la influenza que azotaba México en ese momento.
América es el más representativo siendo el equipo mexicano que más triunfos ha tenido en una edición con 9, teniendo dos veces a un campeón goleador como Salvador Cabañas, el que menos derrotas ha tenido en un torneo y el equipo que más goles anotó en una edición con 28 tantos. En 2002 estuvo 10 partidos sin perder. Y es el mexicano que más goles ha metido en un partido cuando venció 8 a 2 al Olimpia en el 2000.
El futbol mexicano es necesario para la Conmebol. No solo en Libertadores, en Copa América también donde siempre ha dejado una imagen digna y sobre todo competitiva. Que de eso se trata el futbol finalmente… de competir y claro está, ganar.