El Real Madrid no levanta, no gusta y pierde hasta en su casa

Otra jornada terrorífica se consumó hoy para el Real Madrid en el Santiago Bernabéu luego de caer por la mínima ante un sólido Villarreal que consiguió el cometido sobre los últimos minutos del encuentro. Aumentando, como si se pudiera aún más, la crisis y el pésimo momento que atraviesa el cuadro blanco en La Liga, a tal punto que ya no solo se despidió de defender el título hace varias jornadas, sino que peligra hasta la cuarta plaza que les permite disputar la Champions League.

Aunque los de Zidane esta vez mostraron una mejor sintonía en ataque que la de los últimos partidos, la falta de definición y el bajísimo nivel por el que atraviesan varias de sus figuras, terminaron por pasar una factura que parece acrecentarse en su costo con el pasar de los días y los juegos. El Madrid generó más que el Villarreal e incluso la figura de Sergio Asenjo se agigantó bajo los tres palos de cada arco en el Bernabéu para que sus compañeros remataran el asalto a la contra.

Desdibujado, como ya es costumbre ver al Madrid de Zidane cuando no le salen las cosas -e incluso cuando le salió todo a la perfección durante dos años-, víctima del ímpetu y aplicando todos sus esfuerzos a la heróica o épica, quedó expuesto en una contra letal que además de volver a dejar en evidencia a Marcelo en otro regreso, culminó Pablo Fornals con una vaselina inolvidable para colgar a Keylor que nada pudo hacer. Después, la cara de ‘Zizou’ era un poema sin atisbo de verso que pudiera explicar otra debacle.

¿Cuáles son las respuestas de Zidane frente a la crisis?

El estratega francés entiende que la situación «es jodida, cada vez más, hoy es una derrota». Además, aseguró que lo que deben hacer es seguir por el mismo camino, no bajar los brazos y continuar trabajando, pues cree que a su equipo no se le dan las cosas debido a que no entra el balón, no a que juegan mal. «Dentro de todo lo negativo que nos pasa vamos a buscar algo positivo», declaró en rueda de prensa.

Por otra parte, Zidane asegura que el sentir del vestuario no es del todo el ideal y hay jugadores que empiezan a sentirse más tocados que otros por la situación. «En el vestuario se habla de mala suerte. Mi explicación es que tiene que llegar un partido en el que toda la mala racha acabe, no sé si será el próximo jueves o el domingo. El fútbol es así. Hemos vivido muchas cosas buenas, y ahora nos toca un momento duro», puntualizó.